En 2017, el Istat
registró a 7216 trabajadores en casa, 3647 de ellos del sector manufacturero
que trabajaban con contratos regulares.
Esto es lo que aborda
The New York Times, cuando se da luz a todas las personas que trabajan desde
casa con sueldos mínimos por no decir deleznables y sin visibilidad alguna por
miedo a perder esa cantidad de dinero por poca que parezca.
Todo esto es lo que
esconde las numerosas marcas catalogadas como “de lujo” detrás de sus etiquetas
y sus altos precios.
OPINIÓN CRÍTICA
Italia como en muchos
de los países registra estas elevadas cifras de personas en un sector al que
todos acudimos.
Parte de culpa recae
sobre nosotros cuando hablamos de marcas de ropa. Diariamente encontramos
prendas de ropa en las tiendas con unos precios abismales cuanto menos, prendas
que compramos aun sabiendo que es casi imposible que su valor sea ese.
A menudo también
podemos comprobar estas trampas cuando encontramos la misma prenda de ropa en
lugares diferentes y con precios bastante diferentes que te llevan a
replantearte cuestiones como estas. En una sociedad consumista y un poco “postureta”
donde nos dejamos guiar por el aspecto de una tienda o por el boom que tenga
actualmente, solo pueden ocurrir casos como estos donde desafortunadamente también
los clientes tenemos la culpa de ello.
No lejos de nosotros
se encuentran las empresas que contratan a esas personas escondidas en casa que
bajo la desesperación aceptan cualquier tipo de trabajo y bajo cualquier condición.
Un trabajo abusivo e
invisible al que no solo se enfrenta este sector sino otros muchos que tras una
buena apariencia y reputación se esconden personas en condiciones lamentables
que nunca salen a la luz.
VALORES JURÍDICOS
Contratos irregulares:
http://www.enciclopedia-juridica.biz14.com/d/contrato-irregular/contrato-irregular.htm
MAYTE GARRIDO CHICA 3ºRRLL&RRHH
ENLACE: https://www.nytimes.com/es/2018/09/21/italia-moda-lujo-explotacion-maxmara-vuitton/
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